
<<Bellos pedazos de países>> I, 2020. Políptico: 24 piezas, fotografía sobre textil (transfer) y marco de hierro negro, 230 x 71 cm / <<Beautiful pieces of countries>> I, 2020. Polyptych: 24 pieces, photograph on textile (transfer) and black iron frame, 230 x 71 cm
El proyecto <<Bellos pedazos de países>> nace durante los días de confinamiento en Madrid. El encierro en una ciudad como Madrid fue duro. La vida se convirtió en una estrecha relación con las paredes de mi pequeño departamento. Por las ventanas, el paisaje no dejaba de ser urbano: edificios y cemento. La necesidad de naturaleza se volvió evidente. Me interesé por ella y por la relación del ser humano con la misma. Añoraba enfrentarme nuevamente a esos sublimes paisajes naturales. Me sumergí entonces en la lectura de Maderuelo sobre paisaje. En el libro “El paisaje, génesis de un concepto” Maderuelo habla sobre las primeras menciones conceptuales de paisaje, cuando aún no existía un término concreto para denominarlo, es decir, cuando aún no existía la palabra “paisaje”. Cuenta entonces que Vicente Carducho publicó en 1633 un tratado titulado “Diálogos de la pintura”, donde en un intento por referirse al disfrute de un paraje real situado a orillas del río Manzanares, sin encontrar el término exacto que sirviese para nombrar ese lugar real y concreto, hace uso de la frase “bellos pedazos de Paises”. De forma asombrosa Carducho explica con su expresión la génesis del moderno término paisaje en español.
Si nos adentramos en la definición de paisaje, Maderuelo nos ilumina al respecto: “el paisaje no es un ente objetual ni un conjunto de elementos físicos cuantificables, sino que se trata de una relación subjetiva entre el hombre y el medio en el que vive, relación que se establece a través de la mirada”. Por tanto, se podría entender el paisaje como cualquier relación que atrapa y conmueve la mirada. En este sentido, el proyecto <<Bellos pedazos de países>> propone captar el paisaje que surge de pequeños elementos de la naturaleza.
Durante “la hora del paseo”, breves y estrictas salidas permitidas durante el confinamiento, comencé a recolectar pequeños elementos para llevarme a casa: piedras, trozos de roca, hojas, ramas, plantas, entre otros. Era una forma de conservar esa naturaleza que tanto necesitaba. Tal vez eran souvenirs de esos encuentros. Los elementos recolectados no eran cualquiera cosa, eran elementos muy peculiares que llamaban mi atención, eran elementos sublimes ante mis ojos. Cada uno de ellos contenía un mundo, insinuaban un lugar imaginario donde divagar. Los objetos en casa funcionaban como micro paisajes. Tomé mi cámara y decidí fotografiar aquello pedazos de naturaleza. De la imagen los pasé a la materia. Utilizando transfer los paisajes se grabaron al textil dando como resultado esta sutil serie de micro-paisajes. Estos evocadores paisajes me ayudaron a aliviar la sensación de artificio y a escapar a lugares oníricos que sólo veía a través de ellos.
The project <<Beautiful pieces of countries>> was born during the days of confinement in Madrid. The confinement in a city like Madrid was hard. Life became a close relationship with the walls of my small flat. Through the windows, the landscape was still urban: buildings and concrete. The need for nature became evident. I became interested in it and in the relationship between humans and nature. I missed being confronted again with those sublime natural landscapes. So I immersed myself in Maderuelo’s reading on landscape. In the book «El paisaje, génesis de un concepto» Maderuelo talks about the first conceptual mentions of landscape, when there was still no specific term to describe it, that is to say, when the word «landscape» did not yet exist. He then tells us that Vicente Carducho published a treatise entitled «Diálogos de la pintura» in 1633, in which, in an attempt to refer to the enjoyment of a real place situated on the banks of the Manzanares river, without finding the exact term to name this real and concrete place, he uses the phrase «bellos pedazos de Paises» (beautiful pieces of countries). In an astonishing way Carducho explains with his expression the genesis of the modern term landscape in Spanish.
If we go deeper into the definition of landscape, Maderuelo enlightens us on the subject: «the landscape is not an objective entity or a set of quantifiable physical elements, but it is a subjective relationship between man and the environment in which he lives, a relationship which is established through the gaze». Therefore, landscape could be understood as any relationship which captures and moves the gaze. In this sense, the project <<Beautiful pieces of countries>> proposes to capture the landscape that emerges from small elements of nature.
During «walk time», short and strict outings allowed during confinement, I began to collect small items to take home: stones, pieces of rock, leaves, branches, plants, among others. It was a way of preserving that nature that I needed so much. Maybe they were souvenirs of those encounters. The collected elements were not just anything, they were very peculiar elements that caught my attention, they were sublime elements before my eyes. Each one of them contained a world, they hinted at an imaginary place to wander. The objects at home functioned as micro landscapes. I took my camera and decided to photograph those pieces of nature. From image I turned them into matter. Using transfer the landscapes were etched into the textile resulting in this subtle series of micro-landscapes. These evocative landscapes helped me to alleviate the feeling of artifice and escape to dreamlike places that I only saw through them.







<<Bellos pedazos de países>> II, 2020. Políptico: 24 piezas, fotografía sobre textil (transfer) y marco de hierro negro. / <<Pretty pieces of countries>> II, 2020. Polyptych: 24 pieces, photograph on textile (transfer) and black iron frame.